Verdulería

Una verdulería atendida por dos chicas que se casaron y se vistieron luego como gitanas, llegamos tarde al reparto con mi viejo, dijeron que nada de productos vencidos, bajamos dos bolsones de arroz, y un jugo, así por un año, jugo y arroz.
La chica gitana que antes no se vestía así, pero se casó y ahora con su hermana, atienden o tienen una verdulería tirando a polirubro, no con camión ni camioneta ni esas cosas, una verdulería, y ella se viste de verde y verdes claros y un pañuelo de colores que pega el sol y mueve los brazos espantando las moscas de las frutas de estación, estira el toldo media sombra algo pequeñito nos deja ver a nosotros los repartidores de espalda doblada, carga y carga papa, cebolla, tomate y zanahoria y zapallito… que puerro y que yo que se! No hay nada de eso, no llega al mercado, es el año 1994 cuando solo estaba de Jean y una remera sin estos pañuelos y esas cosas de ahora, sino que escuchaba la radio y yo escuchaba en el reparto la radio y cuando pasabas por las casas ese tipo siempre sonaba, su póster en la verdulería pegado y concursábamos llamando, y le preguntaban cuales eran sus fantasías, y era, aunque no lo dijera algún día largar la verdulería y de mi parte también lo mismo sin que se entere el marido que tengo entendido quería molerme a palos o tenía planeada una venganza fatal como las que suelen hacer en la comunidad gitana.
Ahora estamos cambiando el recorrido porque hubo un choque en esa cuadra en la avenida y el colectivo entonces tiene que pasar por la puerta de la verdulería y todavía se pueden ver eso viejos pañuelos ya medio sucios y nada de puerro y que yo que se! No hay nada de eso no llega al mercado.

foto : cintia romero